¿Qué es el ojo vago y cómo se previene?
El término médico para el ojo vago es ambliopía. Significa “visión disminuida” y deriva del griego amblios = débil y opsis = visión.
La ambliopía funcional es el déficit visual uni o bilateral, sin lesión orgánica detectable en el sistema óptico y se produce como consecuencia de falta de estimulación visual adecuada durante el período crítico de desarrollo visual en la infancia.
El sistema más antiguo pero al mismo tiempo más eficaz para tratar la ambiopía son las oclusiones, método que debe ser pautado por un médico oftalmólogo, asociado o no a la prescripción de gafas.
La pauta de oclusión depende de: la edad del paciente, el grado de ambliopía y el tiempo de tratamiento. Con las oclusiones pautadas no sólo podemos recuperar la visión e igualar la agudeza visual en ambos ojos, sino también conseguir la alternancia de ambos ojos, para que el niño desarrolle la visión hasta el 100% en ambos ojos.
En el desarrollo de la visión influye la plasticidad cerebral, por lo tanto cuanto más pequeño es el niño, mayores son las posibilidades de recuperar la ambliopía.
¿Cómo funciona la visión binocular o 3D?

La estereopsis o visión binocular es el sistema que nos permite apreciar el relieve de las cosas y tener visión en profundidad. Cuando dirigimos la mirada hacia algo que nos interesa, cada ojo funciona como una cámara independiente y la imagen captada por cada ojo viaja hacia el cerebro que las integra como una imagen única en 3D.
“Para que sea posible la visión 3D, se necesita buena visión y fusión con ambos ojos por lo que las personas con ojo vago no la desarrollan correctamente».
La alteración de la visión binocular puede ser detectada en nuestra consulta mediante el Titmus Stereo Test o “Test de la mosca”.
